Fuente: La NaciónMaría Pryor, Pablo Ramírez, Marcelo Senra, Laura Valenzuela, Evangelina Bomparola y La Dolfina, en estos momentos difícilmente piensen en otra cosa que no sea en Nueva York. Es que el 16 de septiembre subirán a la pasarela, ahora en el Lincoln Center, con el nombre de Argentina Group Show.
Con siete looks cada uno, tendrán la oportunidad de mostrarse ante uno de los mercados más fuertes y con mayor proyección en el mundo. Y hacer negocios, como los concretó el equipo que viajó en 2009, integrado por Benito Fernández, Fabián Zitta, Min Agostini, Eufemia y Cardón, el primero en ser impulsado por la cancillería argentina y elegido por el comité especializado de selección de la Mercedes Benz Fashion Week.
Para esta edición hubo un 50% más de diseñadores que presentaron books durante la convocatoria, de los cuales 24 portfolios llegaron a la instancia final. ¿Quiénes dieron el veredicto? Un comité neoyorquino: Syl Tang, columnista de moda de The Financial Times ; Jenny Captain, editora de moda de Hearst , y Arianna Rabani, directora de ventas de Ralph Lauren, entre otros.
Etapa final
Los diseñadores están en la parte final de los preparativos. En lo último, pero no lo definitivo, ya que están haciendo algunos cambios marcados por la estilista neoyorquina del NYFW, Brooke Magnaghi, que estuvo de visita la semana última para adaptar las colecciones a las pautas de esa pasarela.
"Vine básicamente a colaborar con los diseñadores para que muestren las colecciones de la mejor manera", explicó en el local de La Dolfina, firma con la que hicieron un brindis, también en compañía de Pablo Ramírez, autor de una de sus líneas, que estará en la Gran Manzana. Además de la suya, con nombre propio.
Después del brindis, con muffins de colores, en una entrevista con Moda & Belleza, Magnaghi contó alguno de las claves para presentarse en esa pasarela.
-¿En qué aconsejaste a los diseñadores?
-Menos es mejor. Valorar la simplicidad. Es mejor presentar las prendas de manera más pura que teatral; no es que no me guste la puesta en escena, por el contrario, pero si se hace hay que hacerlo muy bien, como en París, por ejemplo. La ropa debe hablar por sí misma.
-¿Qué opinás sobre el diseño argentino?
-Estoy sorprendida. Esperaba ver más color y más volados. Lo que encontramos fue individualidad, cada uno tiene su identidad.
-¿Qué ideas aportaste en estos días?
-Miramos las prendas, jugamos con los materiales. María Pryor agregó una nueva silueta. Me mostró sólo vestidos y le sugerí poner también faldas, porque es bueno mostrar variedad: vestidos, polleras, pantalones. También se agregó color. Evangelina tenía un vestido negro que lo hicimos en un rosa metálico, con textura. Increíblemente, casi todos los diseñadores hicieron sus prendas en blanco y negro.
-¿Cómo lo explicarías?
-En que optan por lo seguro. Cuando uno lleva una prenda a un show se necesitan colores, contrastes, texturas. Con Pryor agregamos pastel. Con Valenzuela, un azul claro.
-¿Qué es lo que hace falta y qué es lo que sobra en un país tan nutrido de propuestas?
-En Estados Unidos hay de todo para todos. Marcas masivas, caras, económicas, diseño independiente, ropa linda, fea, lo que quieras. Lo nuevo y diferente siempre despierta entusiasmo. Y la Argentina puede ofrecer algo personal.
-¿Qué estructura se necesita para conquistar y permanecer en el mercado?
-Hace falta estar en un showroom, con un representante que maneje el negocio. Y un agente de prensa. Muchas veces los showrooms hacen las dos cosas.
-Y si usa la ropa una celebrity...
-Por supuesto. Publicidad gratis. Si una de ellas lleva algo tuyo sale en los medios de inmediato. Y la gente enseguida pregunta dónde comprarlo. Por eso también es importante contar con un website.
-¿Cómo es la prensa en NY?
-Es muy crítica, pero no hay que desanimarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario