Fuente: InfobaeTodas mueren por tener un par de zapatos de Jimmy Choo pero pocas contaban con el poder adquisitivo para comprarlos. Hasta que a la cadena sueca H&M se le ocurrió contratar al reconocido diseñador para que creara una línea para ellos con una única condición: precios accesibles.
El día que se pusieron a la venta los diseños, se armaron largas filas de mujeres desesperadas por conseguir un par de zapatos que pueden llegar a costar unos 500 euros a sólo 100. Y ocurrió lo esperado: se agotaron al instante. La formula cierra a la perfección.
En el país, esta tendencia también empieza a tomar forma. Benito Fernández, el diseñador preferido de los famosos, preparó hace pocas semanas una línea bajo el lema “Diseño para todos”, que se comercializa en la cadena Jumbo.
Silvina Sobrino, responsable del proyecto en la cadena de supermercados, explicó que la iniciativa surgió a principios del año 2005, cuando empezaron a notar como tendencia mundial la participación de diseñadores de alta costura realizando diseños exclusivos que se comercializaban únicamente en tiendas departamentales.
En la primera edición de "Diseño para todos" fue convocada Jessica Trosman, quién diseñó remeras y musculosas con su impronta. La siguiente propuesta fue la de Seco, cuando lanzaron impermeables y botas de lluvias. A los 15 días, los productos estaban agotados.
Esta vez el turno fue Benito Fernández. "La respuesta del consumidor a este tipo de propuestas es muy buena. Cuando ven el exhibidor en las tiendas se paran a mirar, tocan los productos y los llevan sin dudarlo", señaló Sobrino.
Y agregó: "Antes del lanzamiento de Fernández ya se estaba corriendo el rumor y mucha gente comenzó a preguntar ansiosa cuándo encontrarían la colección en las tiendas. Los vestidos ya están casi agotados".
Por su parte, el diseñador consideró: "Yo creo que ahora la calle es la que está tomando la tendencia por eso está el fenómeno de los coolhunter”.
Fernández contó que cuando lo invitaron a formar parte de la iniciativa, lo que más le interesó fue “la modernidad del concepto" y "la cosa del volumen, de poder llegar a la gente”.
“Desde hace un año estoy con el pret-a-porter y los jeans, y esto me sirvió como una práctica, un ejercicio para las cantidades que no estoy acostumbrado. Y además, eso de proyectarse en qué gente lo va a consumir, a qué mercado apuntas, el tema de mezclar el público de Jumbo y el que me conoce, la relación del precio y la calidad. Fue todo un desafío”, aseguró.
La democratización de la moda
El diseñador destacó que la idea de la democratización de la moda es algo que en el mundo es frecuente, un fenómeno por el cual las grandes tiendas “incorporan el diseño desde otro lugar".
"Se está terminando con el prejuicio. Antes era impensado que un diseñador haga un vestido para la princesa más mirada de Europa como los Máxima y que también haga una remera para un supermercado, eso es un cambio”, enfatizó.
En ese sentido, Susana Saulquin, destacada socióloga, se mostró a favor de esta democratización de la moda. “Está en la línea de las grandes transformaciones que están ocurriendo en el universo de las moda”, señaló y dijo que esta es la manera para que todo el mundo pueda acceder “a vestirse con diseño y con precios al alcance”.
Según la especialista, la iniciativa de las grandes marcas se debe a que la mayoría está incorporando diseñadores “porque necesitan salir de las series masivas y sin personalidad”.
Para Saulquin, es una forma de acción “muy interesante” porque no se conocen los nombres de los diseñadores de las grandes marcas y ahora, con las nuevas incorporaciones, les están sumando valor.
“La moda tiene que ver con lo social. Estamos todos pensando en todos. La moda es una industria, no es solamente lo fashion, está bueno que no sólo sea la foto de color sino mirarlo desde otro lugar”, concluyó Fernández.
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